En esta composición matérica se observa el carácter predominante de la planta del edificio del Rectorado, con una simplificación al hacer paralelas sus alas. Ésta se ha conseguido con la utilización de lamas de madera, como las que encontramos en el interior del edificio. El volumen principal se ha representado con una cerámica, a fin de recordar los aplacados del edificio. La parte frondosa de la entrada se concibe mediante una "pasta" de pintura y hojas en un tono oscuro, con una cara que podemos encontrar en esas inmediaciones en la fachada.
En el centro, vemos como una sucesión de rectángulos evocan esos largos pasillos que se dan en el patio de columnas y en la pasarela. Se aprecia también el juego de luces y sombras que se da en ese pasillo de columnas. El rectángulo del fondo se relaciona mediante el color con la ubicación del cubo, haciendo notar que esa perspectiva también se da allí. Además, ese rectángulo más oscuro tiene una continuidad sobre las lamas de madera, intentando evocar el paso de la pasarela sobre el patio.
En la parte superior e inferior, como si de un despliegue se tratara sobre la planta, aparece un material que evoca al zócalo del muro exterior, con una escayola que allí encontramos. Se completa la abstracción con textura de periódico. En la zona izquierda, la direccionalidad de esta textura está relacionado con la zona de paso que allí existe.
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